Siniestro Total: “Acto Fundacional” (LP, Munster)
Tras la reciente publicación del 12” Que no cunda el Orden, que incluía la mítica maqueta del 82, ahora Munster se descuelga con este disco, que retrocede aún más en el tiempo, y nos presenta el primer concierto de los de Vigo en el 81.
Parece que le están cogiendo el gusto a este material primerizo de Siniestro Total y que han encontrado una nueva gallina de los huevos de oro. Ya suena por ahí otras cosita que piensan sacar dentro de unos meses... No sé si será tan rentable como lo de Décima Víctima, que parece que se vende como churros y se han animado a reeditar en muy poco tiempo los dos LPs y ahora una cajita preciosa con todos los singles. Hacen con nosotros lo que quieren…
Bueno, vayamos con este disco. ¿Hasta qué punto merece la pena comprarse este artefacto? Porque se puede pensar que si tienes los LPs y, además, te acabas de comprar el 12” con la maqueta del 82, esto va a ser más de lo mismo. Bueno, sí, es más de lo mismo, las mismas canciones de la etapa Coppini, las que se escuchan en los dos primeros 7”s, en el primer LP y también en la maqueta. Pero, desde luego, en directo tienen otra fuerza y, además, hay cuatro temas que no se publicaron nunca. Vamos que si eres muy fan de la banda es obligatorio y si te gusta el Punk así en mayúsculas, esto suena de lujo y deberías hacerte con ello.
El concierto tuvo lugar en el Cine Salesianos el 27 de diciembre de 1981, adelantando el día de los santos inocentes con esta gran broma que, escuchada con la perspectiva de los años, tiene una importancia vital en el Punk ibérico. Otro motivo para hacerte con esta joya.
Fue grabado en un cinta BASF y lo cierto es que el sonido es bastante bueno teniendo en cuenta los medios.
La verdad es que el concierto ya empieza con la mítica frase de “Directamente llegados de Irán, música celta, skizorock: Siniestro Total” que te pone los pelos de punta. Somos muchos los que tenemos grabada a fuego esa presentación que les hizo Antón Reixa y que se usó en el CD recopilatorio del 93 Ojalá estuvieras aquí, como intro de Viene el verano, tema también extraído de este concierto que nos ocupa. Ahora por fin escuchamos todo en el orden correcto y el resto de las canciones.
Tras dicha presentación, el grupo empieza con una intro en la que Coppini se limita a repetir el nombre de la banda. Este es uno de los cuatro temas inéditos y, desde luego, aunque le falta una letra ingeniosa y algo de desarrollo, es Siniestro Total en estado puro.
Luego continuan con versiones bastante salvajes y caóticas de Emilio Cao, La tetas de mi novia, Ponte en mi lugar y, la ya citada, Viene el verano (una de mis favoritas por lo destartalada que suena). Si levantasen la cabeza los Undertones…
La sensación de caos en toda esta parte es flipante y en algún momento llegan a perder pie de forma catastrófica. El mismo Alberto Torrado anuncia por el micro, todo cabreado, que no oyen por monitores ni la batería ni la voz.
Cuando empieza el segundo de los temas inéditos, lo cierto es que la tensión y el salvajismo quedan bastante amortiguados. Bomba Atómica en el Policarpo Sanz es una version de los Jam demasiado popera y que no consiguen llevarse a su terreno ni alcanza las cotas de gamberrismo y punkitud de los temas precedentes.
El tercer tema inédito viene a continuación. Isla Tropical es una composición menor de Costas que allí se quedó. El cuatro tema inédito también se ofrece a continuación y, la verdad, es que sorprende que escojan un tema Ska (version de los Specials). No es ninguna maravilla, pero vuelven a recuperar el salvajismo del principio y el agua regresa a su cauce.
Entramos ya en la cara B y viene una de mis favoritas de siempre: Gusanos en tu alcoba. Coppini grita como un hijo de puta en las estrofas, con un registro bastante más grave, que la verdad resulta muy desagradable y tremendamente Punk. En los estribillos sí que reconocemos más su característica voz aguda, aunque siempre (y durante toda la actuación) tamizada por ese sonido directo bastante más gritón y desprovisto de matices, pero igualmente flipante.
Juegas al palé baja el ritmo porque es un medio tiempo, como bien sabéis, pero consiguen esa deliciosa atmósfera Post Punk tan siniestra, que pone los pelos de punta otra vez. Destacan además algunos pasajes muy interesantes que luego en el disco quedaron enterrados o se los cargaron.
Ayatollah por supuesto recupera el pulso Punk y comienza de nuevo la tercera guerra mundial. Se marcan a continuación el No me gusta bailar (una de las piezas clave de la maqueta que grabarían en el 82) en donde Coppini grita: “sinfónicos que os den por el culo”. Me encanta.
Y prosiguen ya hasta el final con el mismo ritmo desbocado, cepillándose temazos incontestables como Te tiraré del ático, Mario, Purdey y Mata jipis en las Cíes, que cierra el concierto.
Para finalizar el disco se incluye el bis, que no querían hacer pero que, finalmente, hicieron por complacer a sus escasos fans (al parecer acudió muy poca gente al show). Repiten Ayatollah y aunque Julián dice que la tocaron ya desganados, la veo una toma incluso mejor que la anterior, sobre todo en el aspecto vocal.
Aberrante, pero realmente fascinante. Más Punk no se puede. Matricula de honor, de verdad.
Mgrtn.
Colegiata: S/T (12”, Discos Banana / Flexidiscos /Cuerdas Fuera Records)
Debut en formato físico de este dúo de Barcelona, tras el single digital de dos temas (incluidos en el disco) que sacaron en su bandcamp este mismo año.
Se trata de un disco cuasi conceptual en donde casi todo gira alrededor de los colegios de curas y monjas, yo diría que de la etapa tardo franquista. Como si de un par de alumnos de alguna institución religiosa caduca se tratase, Anton y Aníbal, ataviados con el uniforme escolar de turno, recrean todo aquello desde las mentes de dos adolescentes rebeldes. Y para ello usan cajas de ritmos y sintetizadores ochenteros creando canciones de Synth Punk lúgubre y frío. En ocasiones son temas marciales y rígidos, contestatarios y de denuncia social incluso, mientras que otras veces recurren más al sentido del humor y a cierto aire Mongo Punk.
Esta dualidad hace que se me antojen como una mezcla entre Algara (sobre todo el primer 7”, cuando aún eran un dúo) y Sistema de Entretenimiento, por citar dos grupos de su misma ciudad. Por un lado se muestren serios, fríos, disciplinados, tristes… mientras que en otras composiciones descargan su enfado a base de gamberrismo y ritmos trepidantes y divertidos de Arcade Punk (sobre todo en parte de la cara A).
Vamos que se desenvuelven en un amplio rango entre Joy Division y Sigue Sigue Sputnik, sin parecerse a ninguno de ellos, pero desplegando tanto elementos depresivos de gran intensidad como otros de frivolidad retrofuturista bastante locatis. Eso sí, manteniendo cierta coherencia sonora y tirando siempre un poco más hacía lo oscuro y la frialdad.
La verdad es que no inventan nada, pero las canciones son muy buenas y tienen mucho tino en la ejecución.
Creo que han firmado un discazo muy a tener en cuenta en el panorama actual, que aunque mire mucho hacia atrás, hacia los primeros 80, supone un soplo de aire fresco entre tanto grupo de Egg Punk mal entendido y repetitivo que nos sigue asolando.
“Te juro mamá que no fumo base, te juro papá que no es una fase”, la puta mejor frase en una canción en lo que llevamos de siglo.
Píllatelo ya!!!
Mgrtn.
Billiam: “Sylvies goest to Hawaii” (7”, Jarama 45 RPM Rcds)
Parece que los chicos de Jarama han tirado la casa de la ventana. Hace poco comentamos los lanzamientos de Butrón y Beta Máximo, y ya tenemos aquí dos nuevas rodajas en 7”. Este de Billiam que comento hoy y otro de Mari Pili que comentaré en futuras entradas.
Sin duda, todo un lujazo contar con, ni más ni menos que, Billiam y que, además, les ceda 6 temas nuevos. Aunque por otro lado el australiano que nos enamoró cuando tocaba en Disco Junk, desde que empezó su carrera en solitario (hace ya 5 años), ha sido siempre muy productivo. Entre casetes, 12”s, 7”s y algún que otro “disco” digital, el chaval tiene a lo tonto más de 30 referencias. Ahí queda eso.
Pues bien, aquí tenemos un puñado de temas de Synth Punk y de Egg Punk pero del que aún se puede escuchar sin sentir cierto rubor. Vamos que no es la copia de la copia de la copia. En todo caso bebe directamente de la fuente, de su máxima influencia que son los Ausmuteants (auténticos genios y pioneros absolutos de la escena actual australiana, muchas veces injustamente olvidados). Y, por supuesto, copia también de sí mismo, dentro de un estilo que ha contribuido a pulir y a dar forma.
En la cara A tenemos el tema de cinco minutos que da título al disco, pero que en el fondo se descompone en pequeñas piezas, a veces más pausadas, otras más locas y aceleradas. Es un tema que tanto en las partes rápidas como en las lentas recuerda, por supuesto, a los Ausmeteants. Pero unos Ausmuteants de vacaciones en Hawaii, o tal vez sea más correcto decir de vacaciones en Disneyworld. Bastante entretenido y con mucha calidad.
Y en la cara B tenemos 5 temas sueltos, en donde mete más zapatilla y se vuelve más Punk, rozando en ocasiones en HC Punk. Temazos todos muy salvajes a la par que divertidos. Un poquito de Nobodys, un poquito de Angry Samoans, un poquito de muchas cosas del siglo pasado, pero con un sonido actual, llevándoselo a su terreno y con muchas dosis de gamberrismo.
En definitiva, "un tema de 5 minutos y 5 temas de 1 minuto”, para dar botes y pasarlo bien.
Mgrtn.