jueves, 30 de junio de 2022

Críticas 260: Chain whip, Hologram, Tenso

 


Chain Whip: “Two step to hell” (12”, Drunken Sailor Records)

Tenía en la wishlist el LP de debut la banda del 2019 desde que salió y no lo he podido pillar hasta ahora (y ha sido gracias mi amigo Juancho, que estará leyendo esto). Eso sí, es la reedición de Drunken Sailor del año pasado (hay otra de este mismo año auto editada por el grupo).

Y, a la vez, he pillado el disco que nos ocupa, el 12” del 2021 que sacaron a la limón Neon Taste para el mercado americano y Druken Sailor para el europeo. Ambos sellos lo han vuelto a reeditar este mismo año, por cierto. Además existen multitud de versiones en distintos colores. Si le sumamos a eso que también el año pasado se reeditó en 12” su demo del 2020, podemos decir que los canadienses lo están petando.

Pues bien, si su LP del 2019, titulado 14 lashes, por muy de cadena metálica que sean los latigazos, se podría definir bastante mejor como 14 pedradas directas a la cabeza, este último 12” bien podría titularse 6 pedradas más.
Se trata, pues, de un ejercicio continuista. Y siendo, como son, un grupo con tan solo 4 años de vida, no es nada reprochable ya que aún no se les puede tachar de repetitivos y, además, su fórmula es pura dinamita y funciona como un tiro.

Practican un HC Punk a piñón fijo, sin concesiones, con unas voces hábilmente combinadas que encuentran el equilibrio justo entre el grito pelado, la rabia y la personalidad. Desgañite ganso, gargantas sangrantes y tonalidades agudas que huyen de la basta guturalidad para remarcar que aún existen clases y que no basta con gritar a lo que da, sin más.

Canciones muy dañinas, descargadas con toda la energía manteniendo el control en todo momento, pese a estar circulando por el borde del precipicio continuamente a punto de caer al vacío.
Ideales para un pogo brutal e incluso para corear debido a que a pesar de la velocidad dominante, hay ciertos resquicios melódicos (en este último disco, creo que más) a los que sujetarse (muy canadiense esto, je).
Me imagino que ese es el secreto del éxito de la banda. Tan sencillo como acelerar y embrutecer himnos redondos coreables. Pero ojo, que hay que saberlo hacer.

En este sentido, aunque salvando las distancias (porque Chain Whip son mucho más bestias y salvajes, y definitivamente mil veces menos melódicos) me recuerdan a bandas de Punk melódico aceleradas con voces toscas del estilo de Off with their heads.

Lástima que aquí los temas solo sean 6 (yo creo que casi hubiesen cabido en un 7”). Pero bueno, sea como sea, es un disco muy muy bueno y que merece mucho la pena.

Rabia contagiosa. 

Mgrtn.





Hologram: “No longer humans” (LP, Iron Lung Records)

Ya comenté por aquí el tremendo debut en 7” de esta banda de Austin en 2018 vía La Vida Es Un Mus / Hysteria. En 2019 salió una cassette con tres temas nuevos y ahora le toca el turno a su primer LP, y última referencia hasta la fecha de esta banda de Austin, que vio la luz el año pasado. Y con la garantía de Iron Lung, que no es poco.

Lo cierto es que el LP no decepciona. Siguen igual de salvajes que en el 7” con su HC incómodo, feista, hiper sucio y veloz. Eso sí, al tratarse de un larga duración ponen a prueba la resistencia de nuestros oídos para absorber tanta mierda, tanta pelusa, tanto cambio de ritmo imprevisto, tanto acople, tantos gritos, tantas distorsiones desagradables y tantos golpes de batería asesinos. Que no es lo mismo escuchar este tipo de bandas en un 7” que en un 12”.


Pero vamos, que en el single venían ya 5 canciones y en el LP se marcan 9, no hay tantísima diferencia en cuanto a cantidad de temas y duración. Y, además, aquí suenan un poquito “mejor”, en el sentido de que el sonido no se hace tanta bola creando un manto de distorsiones embarullado y están más definidos los instrumentos, más “separados”.
O sea que se entiende mejor todo y además contribuye a darle un toque más dañino a las canciones, que se tornan más punzantes y mucho más incómodas, atacando desde distintos flancos a la vez.

Una auténtica delicia para oídos “iniciados” e imagino que un caos y todo un purgatorio para fans de Damned o de Ramones (por ejemplo) poco abiertos de orejas.

A destacar los pasajes menos veloces (sobre todo en el tema que cierra el disco) cuando juegan con la tensión e intentan hipnotizar al oyente induciéndole al trance, con sonidos más propios de un aquelarre medieval que de un grupo de HC al uso.

Basura maestra. Sobresaliente. 

Mgrtn.




Tensö: “La generación cristal” (LP, Little Jan’s Hammer / Hermano Mono)

Bueno, bueno, bueno, pues el nuevo grupo Punk “de moda” de la piel de toro no viene de
Valencia ni de Barcelona, de hecho, ni siquiera está en la piel de toro, vienen de Canarias.
Debo confesar que cuando un grupo empieza a llamar mucho la atención en la escena le
cojo cierto manía si yo no les he “descubierto” antes. Así, dejé pasar una o dos veces la
ocasión de verles en directo. Escuché algún tema, así rápidamente en el móvil (que se oye
de pena, la verdad). Suficiente (creía) para tacharles de la lista y que se convirtiesen en el
grupete de moda al que yo odio como... No, no voy dar nombres, Jajaja.

Pero el otro día, me decidí a ir a verles porque venían a tocar con Irreal (que tampoco me
matan pero no están mal y en directo molaron bastante, la verdad). Y, además, era un
concierto de 6 euros, de esos que había antes de la pandemia y que tanto molaban (que ya
está bien de pagar 12/15 pavos por ver a grupos nacionales “de okupa” en salas).

El llenazo del Wurli un lunes, por un lado me gustó (aún hay esperanza para el Punk y
bastante gente joven, aunque sean del rollito riñonera), pero por otro me volvió a saltar la
alarma de “grupo de moda”.
Bueno, pues al final, tuve que dejar aparcados mis prejuicios y reconocer, tras presenciar su
show, que muchas veces cuando un grupo gusta a tanta gente es porque es bueno de
verdad.

El LP de este mismo año contiene nuevas grabaciones de temas su maqueta del 2021 y un
par de canciones nuevas. Y lo cierto es que, aunque sea muy tentador compararles con
Familia Real por ser canarios, las similitudes no van mucho más allá del acento en algún
pasaje aislado (sobre todo en los momentos más calmados) y de que, por supuesto,
practican Punk en estado puro.

Tensö no se andan con demasiadas sutilezas y practican un Punk desnudo la mayoría del
tiempo, que cautiva precisamente por eso. Por eso y porque en el fondo hay muchos
matices, aunque sean muy básicos, que ayudan a colorear, sin que te des casi cuenta, esa
falsa desnudez.

De acuerdo que hay mil influencias reconocibles y vale que en algún momento, por ejemplo,
por el color de la voz en “Pirotecnia” pueden sonar a La Urss (incluso cuando se animan a
hacer un tema con ciertas raíces andaluzas como “Voy a matarte”), pero creo que consiguen
pasar por la batidora todo eso y vomitar una mezcla con cierta personalidad.

Y lo logran incluso pese a la poca homogeneidad de los temas, que fluctúan entre el Punk
vacilón más “tenso” y el HC Punk más trepidante y rabioso, pasando por momentos casi
marciales, pasajes algo más oscuros o ese toque “flamenco” ya mencionado.

Ayuda también a que los temas no sean siempre el mismo, el uso que hacen de los
instrumentos, convencidos de que no hace falta que estén sonando todos a la vez a todo
rabo para hacer Punk. Y es que destacan mucho los pasajes en los que no hay guitarra,
incuso cuando se queda sola la batería.

En definitiva, es un disco muy disfrutable, muy cabreado y, lo más importante, muy puro,
muy infantil (en el buen sentido ochentero de la palabra) y muy creíble.

Mgrtn. 




jueves, 23 de junio de 2022

Críticas 259: Asylum, Gai, Karma Sutra

 Vamos hoy con tres "reediciones" de grupos de los 80.


Asylum: “
Is this the Price?” (7”, Demo Tapes Records)

40 años han tardado estos chavales de las Midlands inglesas en tener editado algo en vinilo. Y es que, este cuidado artefacto, con libreto de 12 páginas incluido, rescata la única grabación de la banda en su época, una cassette que salió en 1982 vía Retaliation Records.

Previamente, en 1999, se les rescató en CD, pero nadie se volvió a acordar de ellos hasta el año pasado (que salió otro CD y un par de cassettes con directos y distintas grabaciones) y este mismo año en el que, además de este 7”, han sacado un par de CDs más.
Vamos, que están de plena actualidad. Más vale tarde que nunca, ¿no?

Por si las lapidarias frases de “Death of music” y “Birth of Noise” de la portada no arrojan luz suficiente sobre el tratamiento que le dan a sus canciones, en la contraportada podemos leer aquello de “Noise, Not Music”. Cristalino, ¿no? No hace falta ni escucharlo, Jajaja. Eso sí, dan muchas ganas de hacerlo, porque este 7” es un caramelito.

Un caramelito envenenado con 6 temas de pura cacofonía. Una batería a toda hostia y sin control, que suena como si estuviesen golpeando hígados repletos de pus con unas barras de acero, campa a sus anchas sobre unos instrumentos que se presuponen guitarra y bajo con las distorsiones más podridas que te puedas imaginar, tocando una nota continua que no existe, y una voz que grita muy cabreada algo completamente incomprensible y atonal. Súmale algunos acoples por aquí y por allá y ya tienes caballo ganador.

Se le saltan a uno las lágrimas, en serio. Esto es Noise puro y lo demás son gilipolleces. Es como si pinchas la aguja del tocadiscos directamente sobre un papel de lija.

Tus vecinos agradecerán la escasa duración de los temas (menos de un minuto), pero siempre puedes ponerlo vuelta y vuelta, una y otra vez, hasta que llamen a la policía.

Sencillamente flipante. 

Mgrtn.




Gai: “Violent party Years 1983-84” (LP, Unofficial)

Piratón que salió en 2020 y recupera valiosísimas grabaciones para Violent Party Records de esta mítica banda japonesa de Noise Core. Concretamente la segunda demo en cassette del 84, el flexi 7” Extermination del mismo año y la cassette Damaging Noise del 83.

La banda se formó en 1981 como Swankys y durante dos años (83 y 84), periodo en el que grabaron estas grabaciones y alguna otra, cambiaron su nombre al de Gai, para volver en 1985 al nombre original hasta su último concierto en el 89.

A estas alturas, de sobra es sabido que cuando los japoneses hacen algo lo hacen a conciencia y más si se trata de llevar las modas musicales occidentales al extremo. Sí, es posible que se pasen de la raya y lo conviertan en una caricatura, pero ¡qué puta delicia!

Y aquí tenemos a estos chavales que, asimiladas las enseñanzas de las primeras bandas inglesas que comenzaron a convertir el HC en ruido del bueno, junto con sus compañeros de sello, Confuse (y otros compatriotas como Kuro), crearon el Japanese Noise Core y estilos

nipones afines en los que la velocidad y las distorsiones infernales compiten con el ruido y los gritos de auténticos endemoniados. Abriendo así el camino a bandas inmediatamente posteriores como Human Gas, Tranquilizer, Gasmask Coward y un batallón de grupos de esos que grabaron un flexi y desaparecieron pero hicieron el máximo ruido posible.

Y es que Gai son uno de los grupos más imitados del género según los expertos en la materia.

En esta compilación el estilo de la banda puede parecer un poco errático al mezclar distintas grabaciones, aunque triunfa y gana por goleada el Noise Core más puro y dañino con unas distorsiones que zumban de lo lindo impidiendo reconocer ni una puta nota. En ocasiones más gutural, en otras más agudo, pero siempre con mucho mucho ruido por todas partes. También hay temas menos veloces y más “Punk”, aunque siempre interpretados con esa actitud dañina y caótica de molestar al oyente.

Se recomienda una buena limpieza de oídos al final de cada cara. Sobre todo si después quieres escuchar si te llaman por teléfono o algo.

Geniales. 

Mgrtn.




Karma Sutra: “Be cruel with your past and all who seek to keep you there” (LP, Sealed Records)

Los chicos de Sealed rescatan material bastante oscuro de esta banda Anarcho Punk de Luton que se mantuvo activa durante gran parte de los 80.
Sus dos primeras demos, un par de temas en recopilatorios y las últimas grabaciones de la banda dan contenido a este LP. Además incluyen un libreto de 40 páginas con cantidad de información, flyers, letras, entrevistas
... Vamos que tienes para pasar unas cuantas horas entretenido.

Los temas de la segunda demo se incluyen los primeros, me imagino que por aquello de tener mejor sonido (la verdad es que suenan bastante bien) y porque molan más, jeje.
Lo cierto es que las canciones son una delicia de Punk intenso con regustillo HC que combina a la perfección violencia contenida y melodías. Temas pegadizos y poderosos que se convierten en auténticos himnos.

A destacar la voz que recita/canta con ese tonillo agudo y un poco tembloroso, soltando unos “gallitos” muy de agradecer de vez en cuando.

Completan la cara A los dos temas de los recopilatorios que  tienen cierto aroma a la primera maqueta (que comento justo en el siguiente párrafo), con un aire en exceso "juglaresco"(sobre todo el segundo).

La primera demo (que encabeza la cara B) es un poco coñazo. Al menos al principio, ya que empieza con un par de temas con cierto toque folk/jipioso y con una batería de marcha militar intentando animar el cotarro. Luego se anima el asunto con dos temas de Punk recitado a dos voces, pero siguen teniendo un poco de tufillo a lo anterior, aunque es bastante más soportable y no están del todo mal.

Los últimos temas tiran claramente más hacia el Post Punk. Empiezan con un flanger en la guitarra a todo rabo y aparece una voz femenina compartiendo protagonismo con la masculina.
El toque oscuro y cierta tendencia a experimentar están bien, pero hay unos cuantos elementos ajenos al género que me molestan: ciertos ecos exóticos. Cierto que muchos grupos los combinan muy bien, pero creo que aquí están un poco metidos con calzador. Aunque la cosa mejora cuando se ponen más agresivos. Y los dos últimos temas están mejor que el primero.

No está mal, pero me quedo de largo con los temas de la primera cara, que son una puta maravilla.

Mgrtn.

viernes, 17 de junio de 2022

Críticas 258: Batallón de Mariquitas, Good Times RNR Compilation 3



VVAA: “Batallón de mariquitas” (CD, Sexy Star)

Recopilatorio pirata que recupera grabaciones de valor incalculable de los pioneros ibéricos del transformismo, travestismo y “mariconismo”; haciendo una de las labores de arqueología más concienzuda que he visto, buceando entre cassettes de gasolinera llenas de polvo y vinilos limitadísimos de los 70 y primeros 80.

Artistazas todas de alto nivel con el hándicap de tener que abrirse camino en una época difícil, actuando casi siempre en garitos clandestinos, cuando no solo no existían los derechos del colectivo LGTBI, si no que no existían ni las siglas.

A pesar de que musicalmente este CD no tiene nada que ver con el Punk, he querido hacer la crítica porque me parece un discazo increíble y tiene, ya lo he dicho, un valor incalculable como pieza de arqueología.
Además, es un disco muy muy divertido. Pese a que el grueso de los temas musicalmente no me interesan demasiado (Cuplé, Copla o estilos aflamencados), el tono es siempre muy picante y refrescante y las letras son sencillamente brutales. Y es que, por muy mal que lo pasaran al salir del armario, a la vista está que estas reinas de la pluma no perdían el sentido del humor.

Así, por ejemplo, encontramos tres temas de Violeta la Burra, sin duda una de las más descaradas y rompedoras. No solo reconoce ser “la más puta” del cabaret, si no que se marca uno de los mejores (el mejor para mí) temas del disco, “moraleja”. Una canción de aires morunos (de ahí lo de MORAleja) en donde Violeta nos confiesa que: “No me gusta por delante, me gusta más por detrás, por detrás de las palmeras me la tienes que endiñar”.

La mítica y muy prolífica Otxoa, desde Bilbao, mete tres temas también. Mi favorito es “La Purillos” que en el estribillo dice: “Caballero, caballero deme usted una fumadita de su puro, que me muero. Caballero, caballero, deje usted que con mi mano me deleite con su habano, por que un puro es lo que quiero”.

Aunque, sin duda, cuando canta “Y que me perdonen los de la censura, pues sé que conmigo la tienen muy dura” es cuando pone los puntos sobres la íes.

Tres temas también los de Paco España, que fue el travesti más popular de Madrid del momento. Sus temas también son transgresores y divertidos, pero tienen además un componente reivindicativo que convierten sus canciones en auténticos himnos. Creo que los títulos hablan por si solos: “Libérate”, “Achúchame” y “Guerra para mi cuerpo”.

Reivindicativo también, y sin perder el humor, tenemos a Pierrot, que en uno de sus tres temas dice: ”No contemplo que me contemplen como si fuere un anormal.... Yo pienso que es muy normal ser un homo... homosexual”.
Además su estilo se aleja del folclore ibérico, con muchas influencias extranjeras: ya sean del rollo Can Can o de casino de Las Vegas.

La otra artista que aporta también tres temas a este recopilatorio es Esmeralda de Sevilla que debutó ya en 1950 en la feria de abril. Prefiere apostar por el humor menos grueso jugando con la similitud fonética de palabras como “marisquera” y “mariquita” en dos de sus temas, pero suelta la bomba al final: “Desde que era pequeñita me gustaba un pollón, me sentía mariquita que alegría, que emoción. Que me gustan los soldados que tengan un buen paquete y un capullo colorado que me entre en mi chochete... Miren señores este cuerpo y estas piernas, cuando veo unos cojones me da la cabeza vueltas”. Una de las letras más cachondas, sin duda.

Completan el disco temas sueltos de Félix Granada (que canta la canción que da título al CD), Antonio Amaya (muy rollito Raphael y quizás el tema menos pícaro y humorístico), Rafael Conde “El Titi” (Autor del himno Libérate”) y Johnson (que homenajea al mítico club El Molino, epicentro de toda esta movida en Barcelona).

Y dejo para el final dos de los temas más bizarros.
“EL Rap del Marciano” de Antonio Vargas, la canción más moderna musicalmente hablando. Una barrasada de funk setentero bastante casposo como base sobre la que Antonio rapea cosa fina. “La tierra es ideal, un paraíso natural, es el sitio que me pone y que prefiero para mariconear”.
Y “El pijón” de Escamillo, uno de los artistas de la pluma más censurados, que nos deja una letra sin ningún desperdicio: “La comadrona asustada gritó con voz de loro, este niño tiene tres piernas o la pija como un toro. Soy el pijón. Ni el cipote de Archidona puede lucir la corona que en mi chorra llevo yo
... Don Pijote de la Mancha todos me suelen llamar”.

Pues eso. Una puta maravilla. 

Mgrtn.




VVAA: “Good Times RNR Compilation vol. 3” (2LP, Legless / Erse Theke Tonträger / Under The Gun Records)

Radiografía bastante completita (aunque, lógicamente, por cuestiones de espacio, faltan bastantes bandas) de la escena actual Weird/Egg Punk (y alrededores), con los grupos haciendo versiones, la mayoría de ellas de artistas bastante ajenos al rollo y, por ende, sorprendentes.

Ya sabes, los grupos que suelen aparecer en el canal de Tremendo Garaje y otros similares nacidos de la locura que empezó Jimmy hace ya unos añitos y que parece no tener fin.
Así pues: Punk loco y raruno, amigos y familiares (digamos en una vena más tradicional) o bandas que, directamente, pasaban por allí.

Y es que, aunque el grueso de los grupos tiene ese toque weird de ahora, también se cuelan otros que tiran más hacia sonidos más clásicos y algún que otro pesado que está a un paso del puto heavy metal, Jajaja.

Así podemos ver a “estrellas consolidadas” como Gee Tee, M.A.Z.E., Research Reactor Corporation, Powerplant, Buck Biloxi, Erik Nervous, Dangus Tarkus o Set Top Box... compartiendo surcos con los “nuevos talentos” que llegan a la escena como los geniales Snooper, Real People, Pensioner o Landlords.

Bandas que tienen ya un buen puñado de 7”s y hasta algún LP, mezcladas con bandas que acaban de estrenarse con un 7” o que solo tienen alguna cassette (o ni eso).
Nuestro país está bien representado por dos bandas catalanas: Prison Affair (el único grupo que tiene el honor de colar dos temas, uno de ABBA y otro de Kiss) y nuestros queridos Sistema de Entretenimiento, que se llevan una versión de Décima Víctima completamente a su terreno de Arcade Punk, despojándola de su seriedad de un plumazo.

Lo bueno suele ser eso, que los grupos se llevan a su terreno las versiones y que, como ya he dicho, suelen ser versiones de grupos muy alejados del rollo, como por ejemplo Judas Priest, Chuck Berry, Funkadelic o Neil Young.

Algunos grupos se muestran un poco “tramposos” y cogen versiones más del rollo, como Billiam que tira de Mecano LTD, asegurándose de que es imposible fallar con eso, o Connie Voltaire (de los inmensos Neos Neos, por cierto) que directamente se marca un tema de los Liquids. Otros cogen temas de esos tan redondos y acojonantes que aceptan cualquier estilo, como el caso de 1800 Mickey que tira del 99 Red Ballons de Nena. Así cualquiera, aunque le podría haber sacado más partido y haberse alejado un poquito más del original. Otros, sin embargo arriesgan bastante más, con mejores o peores resultados.

Lo que menos me gusta, como supondréis, son los grupos más roqueritos con sus punteos de mierda y sus estilos setenteros infumables. De hecho, hay un momento al principio de la cara B que solo hay grupos de ese palo y se te cae el alma a los pies porque rompe bastante con la frescura que suele desprender el disco. Prefiero no dar nombres.

Y acabo con un repaso a los temas que más me han llamado la atención.
La versión de M.A.Z.E. de los Rats es simplemente deliciosa.
Snooper tratan un tema de los Beatles también de una forma muy naif y aderezándola con unos toques raritos muy chulos.
Los Landords lo tenían fácil, sí. Porque se cogen el 1-2-X-U de Wire.
Spodee Boy consiguen uno de los temas más cañeros del disco versionando a Stickmen With Rayguns.
Set Top Box triunfan con su versión de Thought Criminals (tontos no son), pero lo que realmente me conquista es el sampler de La Macarena que cuelan en la intro y al final.
Gee Tee nos dejan con el culo torcido pasando a Chuck Berry por su batidora locatis de Mongo Synth Punk.
Curiosamente los dos grupos que eligen temas de Circle Jerks les dan un toque fantasmagórico bastante curioso, por supuestos son los Ghoulies y los Gobs.
Liquid Face hacen una adaptación quizás demasiado fiel de un tema de Screamers (esto sí es jugar con trampa) pero la aceleran y la engorrinan un poco y da el pego, pese a que la voz igual queda demasiado enterrada en la mezcla.
The Caveman consiguen llevarse al Telephatic Love de los Wipers a la playa, con un sonido casi ramoniano. Cuando la melodía es buena
...
Por supuesto Connie Voltaire que, como ya dije, se queda con un tema de The Liquids. 

Roach Fever convierten un tema demasiado garajón como es el Melvin de The Belles en algo bastante caótico y chulo.
Y, cierra el disco, Nick Normal que aprovecha el riff a lo I hate music de Mad del Thorn in my side de Poison Idea para convertirlo en un tema de Synth No Wave, sorprendentemente sin cambiar demasiado.

No diré que este GGRC III es un disco imprescindible, pese a que están muchos de los artistas del Punk actual más interesante, porque son todo versiones y se trata más bien de un capricho (y no precisamente barato, al ser doble).
Pero sí es un disco muy entretenido con momentos mágicos.

Mgrtn.

lunes, 13 de junio de 2022

Críticas 257: PISTOL (Serie TV)

 


PISTOL (La serie de TV, Disney+)

La verdad es que si nos dicen hace años que Disney iba a lanzar un producto de los Sex Pistols nos hubiésemos descojonado (y cabreado), pero lo cierto es que, como Disney es ahora dueña de medio mundo, pues ya no sorprende nada.

Bueno tratándose de una serie, por supuesto, me toca decir eso de ALERTA SPOILERS, Empezamos con el primero de ellos: Sid Vicious muere al final (jur jur jur).

Cuando tuve noticia de la existencia de la serie, como no podía ser de otra manera y como me imagino que les ha pasado a casi todos los fans, me eché a temblar y sabía de antemano que la iba a ver sí o sí y me iba a cabrear también o también. Y es que el negocio audiovisual no respeta nada y mucho menos a los muertos.
Ya tengo reparos con que sean los mismos miembros de un grupo del siglo pasado los que desentierren el cadáver de la banda para, en un asqueroso ejercicio de descontextualización brutal, arrástralo por los escenarios a cambio de unos cuántos euros, estropeando su propia imagen y cagándose su propio legado en cuestión de minutos.
Pero bueno, es su grupo; tienen todo el derecho del mundo a hacerlo aunque a mí no me guste.
La cosa se agrava si es Disney quien lo hace, no el propio grupo. Y más cuando Rotten está en contra de la serie.
Aunque también es verdad que se trata de una jugada muy de los Sex Pistols o más bien muy de Malcolm McLaren, venderle el producto a Disney, The Last Great RNR Swindle!!!!

Bueno pues con todo en contra, y tras acabar de ver la serie en un tiempo récord, al final he disfrutado de este producto bastante. Una vez superados los pertinentes cabreos por el tratamiento de los personajes, la excesiva dramatización de determinados hechos, las trampas consistentes en obviar según que cosas y en desvirtuar o adelantar en el tiempo algunos acontecimientos y otras gamberradas que exasperarán a los más puristas, al final te queda un producto bastante trepidante y adictivo que se ve del tirón y te deja ganas de volver a revisarlo en un futuro no muy lejano.




Lo cierto es que en este tipo de productos biográficos de bandas musicales, ya sean libros, pelis o series, lo que más se suele disfrutar (al menos yo así lo hago) son los inicios de la banda, esa época antes de ser famosos cuando no saben tocar aún y son más atrevidos, más arrogantes e más inocentes. Y, en ese sentido, Pistol se recrea muy mucho en esa época primera y, eso es algo que me gusta bastante. Para que te hagas una idea en el capítulo 1 (solo son 6), aún no sale Johnny Rotten.

Aunque, también es verdad que en el caso de los Sex Pistols su historia es tan corta, que prácticamente no queda otra que recrearse en esta etapa antes de grabar el disco.

Eso sí, cuando llega el momento de abordar el éxito de la banda, lo que suele ser el grueso de la biografía (aunque es cierto que en el caso de los Sex Pistols fue bastante fugaz), aquí nos dejan un poco con las ganas y del capítulo 5 (recién grabado el LP) pasan directamente a su última gira en el capítulo 6, privándonos de contemplar su momento "de esplendor".

Entiendo que esa es la idea, ofrecernos en todo momento la imagen de unos fracasados que viven al margen de la sociedad. Nos privan pues de su éxito comercial, mencionando únicamente que llegan al número 1 de las listas, así de pasada. De acuerdo que el título del disco y toda la polémica de su entrevista en la tele (por no hablar de la estrategia de Malcolm de no mostrar a la banda demasiado), les obligó a cancelar la mitad de los pocos conciertos que consiguieron; pero, como abanderados de la nueva moda (el Punk) y líderes de ventas!!, me imagino que algún concierto exitoso tendrían, aunque fuese en Holanda (je). 

Así pues, pasan de ofrecernos su primeros recitales con algún que otro fan entusiasta (un puñado de ellos, amiguetes casi todos, en las primeras filas) pero siempre con problemas, peleas e incomprensión por parte del público, a ofrecernos su gira por la América profunda, en donde son igualmente incomprendidos por los paletos locales. Y rematan con su último show en SF en donde, pese a estar lleno hasta la bandera, defraudan (estafan) al personal y hasta a ellos mismos.

Vamos que no hay un momento de éxito ni de felicidad para ello y se mantiene su imagen de atormentados, asociales y perdedores durante las seis horas de la serie. 




Y me parece una buena jugada por parte del director pero es cierto que, con lo bien ambientada que está la serie y los detalles estéticos cuidados hasta la extenuación, privarnos de una imagen así es una putada. Pero bueno, cuando dejas a alguien con ganas de más es que has hecho un buen trabajo, ¿no?

En cualquier caso, hay un salto muy grande entre el quinto y el sexto capítulo. Si no querían mostrarnos a los Sex Pistols "dentro del sistema", podrían haberse recreado en sus problemas para conseguir conciertos. Vamos, que yo hubiese sacado un capitulillo más por aquello de ser un poco más exhaustivos con la historia de la banda.

Es cierto que la estética está tan cuidada en todo momento que puede resultar cargante y hasta caricaturesco. No hay un solo momento de sus vidas (ni cagando) en que no estén luciendo modelitos de Vivienne Westwood. Hay momentos en los que no sabes si estás viendo una serie sobre los Sex Pistols o un pase de modelos.

Pero es parte de la dramatización y como tal hay que aceptarlo. Es un espectáculo visual constante que no deja descanso al espectador. Excesivo, sí, pero es que esta historia merece ser contada así, de forma excesiva, ¿o no?

Los secundarios, todo el elenco de personajes que rodeaban a la banda (y a la tienda) en la época están también sumamente cuidados. Y es cierto que, quitando a Jordan (que es un personaje bastante importante y Maisie Willimans se sale interpretándola) o no tienen frase o tienen solo un par de ellas intrascendentes como en el caso de Siouxsie. Pero los ves y son ellos. Creo que son un acierto y aunque sean solo parte del decorado son los artífices de que te metas directamente de lleno en el 1976 que les rodeaba (aunque sea de una forma tan exageradamente bufonesca).



Y vamos ya con el tratamiento de los protagonistas. Obviando, eso sí, el hecho de que lo del parecido físico muchas veces se queda en el pelo solamente y de que son unos chavales igual demasiado guapos y/o poco creíbles.

Así, de primeras, no va a gustar a casi nadie que sea muy fan, pero viéndolo en perspectiva y aceptando que se trata de un producto de ficción (por mucho que se base en una historia real), hay que reconocer que funcionan en la serie, pese a la deshumanización de muchos o precisamente por ello.

Steve Jones nunca se ha visto tan guapo, Jajaja. Es el protagonista de la serie, no en vano está basada en su libro. Y, por tanto, la visión de cómo pasaron las cosas es la suya. Quizás sea en personaje más pasteloso y propio de una peli para adolescentes en donde no falta el romance y el lamerse las heridas en cantidad de escenas tristes. Es el menos Punk en ese sentido, menos incluso que Glen Matlock, el que se supone tienen ese papel de “menos punk” asignado.

Y es que a Glen se le da importancia pero creo que se le desprecia como personaje también del mismo modo que le desprecian en la ficción y en la vida real sus compañeros. Puede ser un recurso para que el espectador lo vea así, pero creo que se le tendría que haber dado un poco más de mérito en toda la historia y, sobre todo, en la creación de las canciones. Aunque también es verdad que es la visión de Jones en la que está basada la serie.

Paul Cook es, directamente, un cero a la izquierda.

Johnny Rotten está muy bien estudiado en cuanto a lenguaje corporal pero es el personaje más caricaturesco (más que Sid Vicious que es quien más se prestaría a ello). Es un individuo que se pasa las 24 horas del día como si estuviese actuando en un escenario, un esperpéntico psicópata al que se le pinta como un idiota al principio y al que al final, solo al final, se le acaba concediendo inteligencia y sentido común. No me extraña que el Rotten de verdad quisiese parar la serie.

Aún así, es el personaje más llamativo y magnético y el que te hace disfrutar de un producto de ficción palomitero. Batman es el prota, pero él es el puto Joker.

Sid Vicious quizás sea el más logrado físicamente, aunque sin pasarse. Se nos ofrece el retrato de un niño inocente que está jugando y se le trata con mucha ternura, no es el retrato de un yonki al uso. Creo que es bastante más cercano a lo que fue en realidad que la visión que se da de él en la peli de Sid and Nancy.

A Nancy la odias desde el minuto cero. Es lo que se pretende. Aunque también tiene su momentito tierno en el que la vemos como un ser humano y una víctima, pero aún así la sigues odiando y hasta te alegras cuando muere, Jajaja.
Por cierto muy bien tratadas las muertes de ambos. Si la serie es muy virulenta en muchos aspectos, exagerando y deformando determinados acontecimientos, aquí en el momento 
precisamente más prostituible, amarillo y comercial, en donde podrían quemar todas las naves que les quedaban, saben ser elegantes.

Chrissie Hynde, sí la de Pretenders. La chica es una de las protagonistas, ¿cómo te quedas? A ver, está basado en “Lonely Boy” de Jones y él le da importancia a su amiga, amén de que ella escribe el prólogo del libro.
Su romance quizás sea la parte más novelada y deformada, pero toda serie requiere su historia de amor, ¿no?

La actriz, la verdad, es que está muy bien y no solo contribuye a dar forma a la vida sentimental del guitarrista de la banda, si no que también nos cuenta su historia propia. Además es una muleta muy importante para ayudar a humanizar a los personajes. Es a través de sus ojos como el espectador descubre que estos individuos no son tan solo unos marginados que duermen en pocilgas y que viven completamente fuera de la sociedad.




Malcolm McLaren está bastante bien logrado como personaje, aunque el actor parezca más joven que los Sex Pistols. Maquiavélico y retorcido hasta la médula y, como al final reconoce el mismo, un niño grande. “¿Qué esperabas? Solo tengo 30 años, no soy tu padre” le dice a Steve.

Y, por último, la exquisita Vivienne Westwood. La adulta en un mundo de niños. Con un pie en la realidad, como madre y como empresaria, y con otro en el utópico loco mundo situacioncita que creó y del que mama todo el experimento llamado Sex Pistols. Auténtica creadora de toda la estética e impulsora de la corriente de pensamiento que aplica Malcolm a su manera.

Eso sí, sufre un tratamiento a la inversa y en el último capítulo se la deshumaniza completamente cuando, tras la muerte de Nancy lo único que se le ocurre es “una idea para una camiseta”.

Pues eso, una serie que abusa del esperpento pero que también intenta tener un trasfondo social y sentimental. Bastante divertida y, cómo ya he dicho, adictiva.

Mgrtn.

viernes, 3 de junio de 2022

Críticas 256: Campamento Rumano, Carvento Felana, Van Dammes

 


Campamento Rumano: “Visones” (7”, Banana Records / Bowery)

La verdad es que parece que fue ayer cuando los chicos de CR sacaron su primer 7”, pero resulta que fue en el 2018. Lo que pasa es que, como nos han estado entreteniendo con proyectos paralelos de estilos similares (Waldo Faldo y Cromosoma), la espera no se ha hecho tan larga.

Bueno, pues sorpresas pocas. Y eso es bueno. ¿Os imagináis que de repente hacen canciones a lo Deep Purple? Jajaja.
Siguen con su rollo de Mongo Punk de canciones cortas, voz aniñada, tecladitos saltarines y letras infantiles y con mala leche. Perfectos sucesores de los Rizillos, pues mantienen toda la subnormalidad y el sentido del humor de aquellos, aunque algo más solventes en el tema musical, como creo que ya dije en la crítica del primer 7”.

El disco suena desmadejado adrede, poco hilvanado gracias, sobre todo, a la saturación y falta de distorsión de la guitarra y a ese sonido tan amateur/maquetero que tanto mola y que tanto detestarán los técnicos de sonido y los seguidores del Rock de Estadio. Marca definitivamente la diferencia entre hacer Punk y hacer Punk Rock al uso.

5 temas muy disfrutables y juveniles, vacilones a tope, que pasan en un suspiro y que, sospecho, les hubiesen cabido en una sola cara. 5 temas envueltos en una carpeta súper llamativa con un acertadísimo recorte de una de las ya clásicas fotos de Vito, de esas escenas costumbristas que se encuentra por la calle y que podría formar parte de la Escopeta Nacional o de To Er Mundo E Güeno.

Como novedad/dato curioso la presencia del mítico Mario Gil (La Mode, Un Pingüino en mi Ascensor) a los teclados. Lujo.

Mgrtn.




Carvento Felana: S/T (LP, Beat Generation)

Tenía un poco traspapelado este 12”, enterrado entre el montón de discos nuevos por oír, y, por fin, lo rescato hoy. ¡Y menudo sorpresón!
Se trata de la primera referencia de este grupo y, al ser nada menos que en Beat Generation, se podría decir que entran por la puerta grande.

Desde luego, la idea de la portada es una maravilla con esa silueta de mujer hecha con gusanitos. Creo que define bastante bien el contenido.

Según los créditos se trata de un dúo. Un fulano que canta y otro que hace la música y las letras.
Y, según la pegatina promocional, combinan la energía de Big Black con el surrealismo de los Residents y la sofisticación de Suicide. A ver, viene firmado por nada menos que Michael Jordan, así que no hay por qué ponerlo en duda.

Lo cierto es que se trata de una locura muy de puta madre. 12 canciones bastante desquiciantes pero con un toque como muy de andar por casa, muy señor que molesta a todos los vecinos con sus ruidos y que va con zapatillas, de esas de cuadritos, de estar en casa.

Tienen cierto toque industrial a lo Throbbing Gristle, aunque lo cierto es que a una escala más reducida, menos grandilocuente. Vamos que los emparentaría más con nuestros

queridísimos Esplendor Geométrico. Creo que es más correcto, sobre todo cuando adoptan un lenguaje más cavernícola, más primitivo.
Y precisamente esa manera primitiva de jugar con la electrónica, sumado a la sensación caótica generalizada, hace que me recuerden también (además de a Suicide) a Primitive Calculators. Vamos que molan mogollón.

Las canciones son cortas y arrancan y se interrumpen tan abruptamente como cabalgan en un disco plagado de elementos disruptivos, molestos y epatantes. Tanto es así que se me ha colado la típica pelusa y la aguja ha resbalado hasta el final del disco entrando en la galleta y me creía que el sonido era parte del disco, jeje.

Si le sumas lo surrealista de las letras (me quedo con la frase “Ráscame mi momentazo”) obtienes un producto ganador por lo que tiene de pretencioso y de premeditadamente ultra raro que, estoy seguro, tocará mucho los cojones y que también hará las delicias de unos cuantos.

Como pega podría decir que igual una voz menos calmada en algún momento, más chirriante, podría ayudar a que el conjunto fuese menos homogéneo. Pero no sé, a lo mejor no funciona tan bien, porque lo cierto es que tal como está, empasta perfectamente.

Para mí uno de los discos del año, aunque haya salido en 2021. Sobresaliente alto.

Mgrtn.




Van Dammes: “Finally There” (7”, Jarama Records)

¿Que cómo una banda de Bruselas afincada en Helsinki saca su tercera referencia en un sello madrileño? Los milagros de internet, supongo.
Pues eso, el tercer 7” de estos chavales y la undécima referencia de Jarama Records.

Como era de esperar en un producto Jamara, nos enfrentamos a un grupo de Punk Rock melódico. Aunque es cierto que acostumbrados a que sus últimos discos fuesen más Punk Poperos, los Van Dammes sorprende por su fuerza y energía.

Las guitarras feroces y agudas arropan unas melodías bastante pegadizas y muy del rollo hooligan. Y, precisamente el volumen atronador de las guitarras, sumado a la irritante escasa distorsión de las mismas, hace del conjunto un disco más agresivo de lo habitual, bastante más Punk.

Aunque en la cara B se tornan un poco más poperos, regresan enseguida al ruido cervecero repitiendo (o haciendo la “parte II”, mejor dicho) del mismo tema que cerraba la cara A.

Las letras, escuetas y subnormales, contribuyen a redondear el aire gamberro que impregna todo el disco.

Pues eso. Melodías fáciles para cantar en el campo de fútbol o en la barra del bar y levantar el ánimo a cualquiera.

Mgrtn.