Los adorables vecinos de Peter Petrelli.

Hago un alto en las críticas de discos para comentar cositas de la tele...


Acabadas las navidades, mientras las series que hicieron parón recuperan con pereza el ritmo, es tiempo de hablar de series nuevas y de series que acabaron antes de Navidad.
Así que, aprovechando ayer el estreno de Los Protegidos en Antena 3, vamos allá.


Hoy en día, gracias a las películas de X-Men, de Spiderman y demás marvelitas, todos, hasta los abuelos, saben lo que es un mutante, un humano con poderes, un supervillano... Y tras el asalto a la gran pantalla, estaba claro que en la tele no se quedarían de brazos cruzados. Smallville ya no da más de sí, y después de todo, Superman es una alienígena, no un terrícola...
Sin duda, la serie abanderada de fulanos con superpoderes ha sido Heroes, aunque ahora no esté en su mejor momento (pero al menos se está recuperando de la catastrófica 3ª temporada con una 4ª entrega un poco más decente). Pues bien, de Heroes vamos a hablar, concretamente de la versión inglesa y de la (ejem ejem) española.


Misfits, la inglesa, ha sido todo un pelotazo, es el cruce perfecto entre Heroes y, por ejemplo, Southpark. Trasgresora, ofensiva, incorrecta (aunque todo es relativo), y por supuesto, el tema de moda: jovencitos con poderes. Se deja ver, aunque peca de pretenciosa.


Pero, es sin duda, Los Protegidos, la "esperadísima" producción de Antena 3, la serie que me ha obligado a escribrir esta entrada. Vamos a ver, ¿cómo se puede ser taaaaaaaaaaaaaaan ñoño? Si hasta El Pacto (Tele5) es mas agresivo que Los Protegidos. Si es que estos heroes a la española parecen recién salidos de Médico de Familia, o de Farmacia de Guardia (por cierto miedo da ese remake, aunque no más que el de Verano Azul....) 
Es cierto que el target de las series de Sci-Fi cada vez es más amplio, y ya hasta mis padres ven cosas como Flash Forward, pero no sé, esto es demasiado. Te pasas el episodio esperando que haga un cameo Carlos Baute o que Paz Padilla sea la jefa de los malos. Y es que, si Misfits mezclaba Heroes con Southpark, Los Protegidos es el cruce ideal entre Mis adorables vecinos y Heroes. Vaya castaña.
Por si fuera poco, el guión del piloto fue catastrófico. ¿Guión?, o quizás debería decir cómo-hacer-que-en-1-hora-y-pico-todos-los-protagonistas-se-conozcan-y-se-vayan-a-vivir-juntos-como-si-fuesen-una-familia-cuando-no-se-habían-visto-nunca-antes. Ni siquiera el chulito rebelde se opone a ello, y en cinco minutos ya está convencido. Un proceso así, en otras series, con un poquito más de calidad, dura al menos dos o tres episodios.
Aunque, no les culpo, conociendo la ridícula esperanza de vida de las series de Antena 3 en cuanto flojean un poquito en audiencia, quizás han querido hacer algo acelerado y contárnoslo todo lo antes posible.
Aún así, me quedé hasta el final. Los personajes (menos la madre) me caen simpáticos, y ese aire semicómico que aporta el padre me gusta. Después de todo, yo me echo hasta 5 y 6 cucharadas de azúcar en el zumo de naranja. En definitiva, esperaba algo más en plan ¿Hay alguien ahí? (a pesar de que ya era ñoñita), más serio, más El internado, y me he encontrado con estos azucarados vecinos a los que adoptaré hasta que me aburra o Tele5 contraprograme algo decente (que lo dudo).


Hablando de Tele5 y de ¿Hay alguien ahí?, no me desagrado la primera entrega de El Pacto. En general actuan todos fatal, pero Marina Salas se sale en el papel de niña pija manipuladora y odiosa, el mismo papel que tenía en ¿Hay alguien ahí? (¿encasillada?), que por cierto a ver cuándo empieza la segunda temporada, que me picó el gusanillo con la primera. Veremos en qué acaba El Pacto, ¿cuál será el motivo por el que las 7 adolescentes se quedaron embarazadas a la vez? Sin duda, promete ser un chasco, o todo lo contrario...


Cruzando el charco (como odio esta expresión), pero sin dejar la ñoñería, nos vimos del tirón la primera temporada de Vampire Diaries. Buuuueno... ¿Habéis visto Crepúsculo?, pues se podría decir que esta es la serie no oficial. El plagio roza la fotocopia: vampiro de 200 tacos que aparenta 25, pero que los productores quieren hacerte creer que son 17, es nuevo en el pueblecito y se matricula en el instituto (a pesar de que sabe mas que los profesores) donde conoce a la joven de la que se enamora. Ella, por su parte, se enomara también de él y comienzan los clásicos problemas entre el más allá y el más acá.
¿Por qué no cambian el roll de la chica alguna vez y es ella la vampiresa y el chico el humano seducido? Parece que Buffy Cazavampiros dejó bien sentadas las bases de las series para adolescentes, y es siempre la humana la que se enamora del vampiro. No se acepta de otra manera. Ni siquiera en True Blood, donde se repite el esquema, ya con personajes que han superado el instituto, eso sí.
Si es que, nos tragamos cada ñoñez... Prueba de ello es que sigo viendo Eastwick aún, aunque sólo cuando no tengo otra cosa.


Para acabar, el final de Dexter. Tuvo momentos trepidantes y otros algo más cansinos, pero lo que es el final final... pues la verdad, no te lo esperas. No voy a soltar ningún spoiler, tranquilos, pero... vaya tela. Te deja un poco... Como muy... No sé...
Pues eso.


En breve más críticas de discos y esperamos que a final de mes, el Pogo En togo 2!!!