viernes, 1 de octubre de 2010
NoBunny, Capitán Salami.
NoBunny + Juanita y los Feos. 30 Septiembre 2010. El Sol. Madrid.
Tal y como había predicho, y a pesar de ser jueves, la sala se llenó (aunque no hasta la bandera). ¿Dónde está toda esa gente en los otros conciertos de Punk? Pues posiblemente emborrachándose en los bares de moda. Afortunadamente para NoBunny, el suyo fue clasificado como un concierto "popular" y tocaba dejarse ver.
Ya sé que soy un pesado, pero me fastidia comprobar como a los White Wires (por ejemplo), que tienen un estilo muy similar y una calidad igual o superior, no fue ni el tato, mientras que a la llamada del conejo acudieron (acudimos) todos como borregos. Eso sí, faltó a la cita el sector más ramoniano, a los que creía grandes fans de la banda.
Aunque, puestos a ser optimistas, debería alegrarme de saber que al menos hay público (aunque a veces se esconda) y no está todo perdido. Porque hay veces que realmente me parece estar asistiendo a las últimas bocanadas de una escena que agoniza. Pero bueno, cada cual es libre de ir a donde quiera y hacer lo que le de la gana. Así que esto es sólo una reflexión en voz alta y no un piquete informativo que pretende coaccionar a los esquiroles. (Qué bien hilado con la reciente actualidad, ¿eh?)
Abieron la velada Juanita y los Feos. Para ser la enésima vez que les veía, no me aburrieron en absoluto. Quizás porque estrenaron bastantes temas nuevos. Atrás han quedado definitivamente los temas más garajeros de sus inicios (que no me acaban de gustar del todo) y ahora se centran en las canciones de su LP y en las nuevas. Se puede ver cierta evolución, aunque sin abandonar el sonido 80's "modernizado" que ya adoptaron en el LP y que a mí me recuerda bastante a los Pegamoides (con ciertos arreglos de pop raruno a lo Bananas, eso sí). Los temas más recientes siguen, como digo, explorando el legado de Alaska y los suyos, pero (al igual que hicieron aquellos), avanzando hacia terrenos más oscuros y menos saltarines. De hecho, las nuevas me recuerdan mucho a la última maqueta de los Pegamoides en donde reinaba la seriedad y el blanco y negro. Logicamente, para un show con No Bunny sus temas más coloridos y animados (como No tengo Ritmo o Madre Soltera) pegaban más que las lúgubres novedades; aunque a mí me gustaron ambas facetas.
No trago, eso sí, la de Angelines y la de Satán que pese a estar cargadas de una nostalgia oscura muy lograda, conservan unos aires demasiados garageros para mi gusto. Todas las demás me convencieron bastante; ahora toca esperar al nuevo disco.
NoBunny empezaron con mal pie, entrando con una balada pseudo country que me horrorizó bastante. Además, el hecho de que el conejo tocase también la guitarra era mala señal. Con el instrumento no iba a tener la movilidad suficiente para organizar el desfase que montó el año pasado en el Funtastic. Y es que yo venía muy condicionado por aquella salvaje actuación, dispuesto a presenciar como se abría algunas cabezas en el frenético pogo. No fue así, pese a que en los temas más populares y animados se formó un jaleo guapo. Pero un repertorio demasiado rancio (y mira que tienen hits suficientes como para dar un conciertazo sin recurrir a su repertorio más aburrido) y la ausencia de la chispa que hiciese estallar el caos, consiguieron aburrirme por momentos. Y, desde lueho, el parloteo entre canciones (excesivo) no ayudó en absoluto.
Esperaba, como ya he dicho algo brutal y me quedé frío. Aún así, sin compararlo con su anterior show en la peninsula, he de reconocer que estuvieron bastante correctos y me imagino que convencieron y contentaron a los neófitos que dieron por bien invertidos sus 10/12 euros. Un tio en calzoncillos con una careta de conejo no necesita hacer mucho más para convencer en una primera cita...
Mgrtn.
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